Rosa Valenty, actriz, vedette y ahora…relaciones públicas
Foto: Rosa Valenty
Joseba Larrinaga
A sus 65 años, los
cumplió el pasado 13 de abril, la actriz y vedette española Rosa Valenty vive alejada de los focos. Desde hace unos años trabaja de relaciones
públicas en una conocida sala de bingo de Madrid. Un conflicto laboral con el
cómico Moncho Borrajo la devolvió hace unos años a la actualidad mediática pero
desde entonces poco o nada se ha sabido de esta gran actriz que cautivó a
varias generaciones de españoles en la denominada época del destape de nuestro
cine.
Cine, teatro, televisión…
y ahora relaciones públicas de un bingo Rosa.
Sí, y muy orgullosa. Son las cosas de la vida. Debuté en el
teatro siendo una niña y ahora a mis 65 años me he tenido que reinventar. Mucha
gente piensa que me he retirado, pero no es cierto, me jubilaron de la
profesión, pero no de la vida, aunque alguno se empeñara. Todavía tengo muchas
cosas que ofrecer en este mundo del cine y el teatro.
Dices que te jubilaron….
No fue una decisión mía. De repente un día dejaron de
llamarme y hasta hoy. No fue una decisión voluntaria, fue obligada.
¿Tu desencuentro con
Moncho Borrajo pudo tener algo que ver en ese
retiro?
Sinceramente no lo sé. Fue una situación muy desagradable por
la que tuve que pasar. Me contrató para un espectáculo y antes de estrenar me
vi en la calle. No tuve más remedio que denunciar aquel despido y todo lo que
tuve que vivir antes y después de hacerlo público fue un calvario. En toda mi
carrera jamás tuve ningún conflicto, fue todo muy extraño, pero no creo que
tuviera tanta fuerza ese señor cómo para impedir que yo siguiera trabajando.
"Era una época en la que
el desnudo femenino era
casi obligatorio en nuestro cine"
Pero el caso es que el
teléfono dejó de sonar. Muchas actrices dicen que ya no hay papeles para
mujeres de cierta edad, ¿tú también lo crees?
De eso no tengo ninguna duda. No hay más que echar un vistazo
a la cartelera, no hay sitio para nosotras. Con nuestra edad creo que podemos
hacer papeles de todo tipo pero los productores y directores se decantan por
gente joven, lo cual me parece muy bien, pero se deberían escribir papeles
para mujeres “maduritas”. Este país está lleno de grandes estrellas que llevan
años sin trabajar, retiradas con pensiones míseras y en muchos casos viviendo
gracias a La Casa del Actor una fundación que da cobijo y amparo a muchos artistas que se ven
ahora prácticamente en la calle.
Rosa, tú viviste una de
las etapas del cine español más recordada, el llamado destape ¿Qué recuerdos tienes de esa
época?
El primer recuerdo que me viene a la cabeza es lo mal que
lo pasaba, no por la película en sí, era una época en la que el desnudo
femenino era casi obligatorio en nuestro cine y yo lo pasaba realmente mal. Los
directores nos lo ponían muy fácil para trabajar, nos trataban con mucho
cariño, pero… era muy joven y muy pudorosa. Fuimos muchas las actrices que rodamos ese tipo de cine, pero
era el que se hacía, no quedaba más remedio. De todos modos yo me siento muy orgullosa
de ello.
El teatro fue donde mayores
éxitos cosechaste, ¿no?
Está mal que yo lo diga pero es la verdad. Han sido cientos
de obras de teatro, musicales, revistas... además es el género donde mejor me
he encontrado siempre. Desde hace unos años se ha recuperado el género musical
en nuestro país pero desgraciadamente la revista murió. Se han hecho intentos
por recuperarla pero no ha sido posible. Es una lástima que la gente más joven
no conozca este estupendo género que durante décadas llenaban los teatros de
toda España.
"En este país pocos son
los artistas
que se pueden jubilar
con una pensión digna"
que se pueden jubilar
con una pensión digna"
A pesar de todo lo que
nos estás contando se te nota contenta, feliz…
Es que lo estoy. Y sobre todo muy agradecida por esta
oportunidad que me dieron Begoña y su marido, los gerentes del Bingo Las Vegas, por poder trabajar aquí de
relaciones públicas.
La gente se sorprenderá
al verte, ¿no?
Al principio sí, ahora ya nadie se sorprende. Los medios de
comunicación ya se hicieron eco de mi nueva profesión, de la cual estoy muy
orgullosa. Me permite seguir estando en contacto con el público aunque de una
forma diferente.
Ya has cumplido los 65,
¿toca jubilarse?
No, ni quiero ni puedo. En este país pocos son los
artistas que se pueden jubilar con una pensión digna. Siempre hemos estado muy
desprotegidos en este sentido. Si me jubilase ahora no cobraría ni 400
euros, con eso te lo digo todo. Pero además yo me siento bien, en forma, joven,
y quiero seguir trabajando. Es lo que más me gusta, eso sí, mientras tenga tan buena salud como hasta ahora.
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